Para quienes han crecido en un mundo completamente analógico, sin poder imaginar entonces ni un ápice de todas las opciones que las nuevas tecnologías nos brindan en el momento actual, la brecha digital es una realidad. Una problemática que se extiende sobre todo entre las personas mayores y que es importante resolver, pues, en una sociedad cada vez más y más digitalizada, no estar al día de las innovaciones puede ser un problema para muchas personas, que quedan excluidas de las novedades y oportunidades que ofrece hoy la tecnología y/o encuentran problemas para adaptarse a la misma.
Aun así, es cierto que este abismo tecnológico es más pequeño que nunca. Según el II Barómetro del Consumidor Sénior, que llevamos a cabo desde el Centro de Investigación Ageingnomics, en colaboración con Google, solo en nuestro país, de los 15,8 millones de sénior que componen la población española, más de 10 millones tienen presencia en internet y lo utilizan a diario. Desde para efectuar sus operaciones bancarias, comprar ropa o alimentación, hasta consultar sus redes sociales o realizar cursos o tutoriales online, algunos sénior sí han encontrado el match entre su cotidianidad y la tecnología.
Una generación tecnológica adaptada y adaptable
Más del 60% de la población sénior es tecnológica, pero el otro 40% aún no. Un porcentaje que, además, se acentúa a medida que se incrementa la edad. Por eso, algunos mayores reclaman dejar de ser digitalmente invisibles, y piden que no se imponga el uso de las TIC de forma obligatoria, sino que haya opciones comprensibles para todos. Así, quienes tengan más dificultades o necesidades específicas también podrán seguir accediendo a cualquiera de esos servicios.
Porque, aunque nunca es tarde para comenzar a utilizar las nuevas tecnologías, es importante que las empresas comiencen a enfocar sus productos a este colectivo etario, desarrollando productos digitales que faciliten la usabilidad y la experiencia de usuario, haciéndolas inteligibles para todos los públicos.
Y un camino digital que aún está por dibujarse
Empezar nunca es fácil, pero la voluntad y la constancia siempre logran que el viaje sea más sencillo. Desde Vida Silver nos ofrecen algunos interesantes consejos para adentrarse en el mundo digital sin tropiezos:
- Elige el dispositivo adecuado, que será aquel que mejor se adapte a tus necesidades particulares. Ya que, si buscas simplemente poder realizar videollamadas, no será el mismo que si quieres llevar a cabo gestiones, por ejemplo, bancarias.
- Empieza por las aplicaciones más básicas. Hay tantos programas distintos que casi no podríamos enumerarlos, y lo mejor es comenzar por los más sencillos: puede ser un buscador para navegar por internet, la aplicación del banco con las tareas más simples o WhatsApp.
- Busca ayuda. Aunque entender el funcionamiento de las diversas tecnologías de una forma autónoma es totalmente posible, contar con apoyo a la hora de enfrentarte a un nuevo aprendizaje te puede ayudar a solventar las dudas. Este puede ser desde un familiar cercano, hasta cursos avanzados de informática.
- Dedícale el tiempo suficiente, ponte metas realistas y practica, practica y practica.
La tecnología no espera, pero los sénior cuentan con el poder suficiente para lograr alcanzarla.