Cuando nos planteamos el futuro, uno de los cambios de paradigma importantes a los que nos enfrentamos es el demográfico. El envejecimiento activo de la población y la brecha entre la edad de jubilación y la esperanza de vida, son realidades que deben ser afrontadas por nuestra sociedad.
Debemos fomentar una sociedad más inclusiva, donde nuestros mayores tengan cabida y, especialmente, en la que se ponga en valor a las personas en edad madura de entre 55 y 75 años. El fenómeno del envejecimiento poblacional se debe entender como un valioso recurso y como un reto de innovación de crecimiento, apostando para ello, por el potencial de las personas mayores para cambiar el mundo.
Nos enfrentamos a grandes retos, no solo al de la longevidad, y la innovación social se ha erigido como una gran herramienta, un motor de cambio, que busca darles solución. Desde Fundación MAPFRE, en nuestro compromiso con el bienestar de la sociedad, nos unimos a este movimiento y pusimos en marcha, en el año 2017, nuestros Premios Fundación MAPFRE a la Innovación Social, que actualmente se encuentran en su cuarta edición.
Con este certamen queremos impulsar iniciativas que tengan como objetivo resolver problemas reales, aprovechando en muchos casos las sinergias que ofrece la tecnología y poniendo a las personas y al medioambiente en el centro de las prioridades sociales y económicas.
Para poner en relación las soluciones que aporta la innovación social con los retos que plantea el envejecimiento de la población, en esta cuarta edición de los Premios, hemos incorporado como novedad una nueva categoría: “Economía del envejecimiento-Ageingnomics”.
Con ella, queremos visibilizar e impulsar iniciativas que fomenten la participación de la sociedad madura, personas de edad comprendida entre 55 y 75 años, con opciones de voluntariado, emprendimiento y vinculadas, entre otras, al ocio, a los viajes, la movilidad, la salud, los seguros y la cultura.
Buscamos una visión positiva sobre el fenómeno del envejecimiento poblacional, a través de la participación intergeneracional, y en este sentido, esperamos impulsar proyectos que generen impacto social, trabajando en retos relevantes para los mayores, ofreciéndoles un envejecimiento activo y una jubilación de calidad llegado el momento.
Deseamos mucha suerte a todos los proyectos presentados en las tres zonas geográficas objeto de nuestros premios: Europa, Brasil y resto de América Latina y en las tres categorías: ageingnomics, salud (e-Health) y movilidad segura y sostenible.
La cuarta edición de nuestros premios sigue su andadura.
La innovación social es imparable.